- En el mediano plazo, si no se llega a una negociación, el mercado podría experimentar un incremento en los precios de los vehículos, en medio de una crisis del sector que lleva 18 meses.
- Este antecedente genera desconfianza entre los inversionistas que puedan ver a Colombia como una opción, esto como consecuencia de la inestabilidad jurídica.
El anuncio del Gobierno Nacional de que dará por terminado el Acuerdo de Complementación Económica ACE 72, el cual regula las relaciones comerciales con Brasil, es una equivocación, que no solo afecta al sector y a los consumidores, sino que significa un retroceso para el sector automotor colombiano. Ya en el pasado se quiso desarrollar un mercado automotor basado en el encarecimiento de las importaciones, el cual no prosperó, así lo señaló Jaime Alberto Cabal, presidente de FENALCO.
“Si el argumento del Ministerio de Comercio es la protección de la industria nacional por la balanza comercial deficitaria con ese país, debemos decir que esta decisión no es la adecuada, según el último informe de importaciones del DANE, la balanza comercial es negativa no solo con Brasil, sino también con Argentina, México, Estados Unidos, la Unión Europea, China, Japón y otros países productores de vehículos.
En el mediano plazo, si no se llega a una negociación, el mercado podría experimentar un incremento en los precios de los vehículos, en medio de una crisis del sector que lleva más de 18 meses. Solo hasta el pasado mes de julio se presentó una tendencia positiva en el registro de matrículas nuevas y esto sería un golpe para las empresas que siguen trabajando en recuperarse.
También, según el vocero de los comerciantes, esta medida del Gobierno puede ser contraproducente e influir de manera negativa en la decisión de las grandes industrias de traer recursos y fortalecer el mercado colombiano, como consecuencia de la inestabilidad jurídica que se evidencia con este tipo de determinaciones y que es una fuerte barrera para la inversión extranjera. “Definitivamente, este antecedente genera desconfianza entre los potenciales inversionistas”.
Se debe tener en cuenta que en el Acuerdo de Complementación Económica ACE 72, que el Gobierno ha denunciado, Colombia tiene una serie de ventajas para ingresar al mercado de Brasil, que no se han utilizado.
“Hasta el momento no se ha determinado el costo de esta decisión que seguramente impactará en la economía y la generación de empleo. Lo que necesita la industria nacional es fortalecer la capacidad técnica, modernizarse y mejorar el talento de su fuerza laboral y para ello no es necesario cerrar el mercado, sino contar con los estímulos necesarios y que pueda tener condiciones para suministrar productos, bajo los requerimientos específicos del mercado de Brasil”, concluyó.