Sorprende el trámite legislativo dado hoy a la Reforma Laboral por la forma tan extraña como se logró armar el quórum.
Se aprobó el informe con el que termina la ponencia y aún falta dar debate alproyecto, pero llama la atención la manera como se configuraron las mayorías.
Sorpresivamente, y al parecer sin autorización de su partido, el Conservador, apareció el representante Jorge Quevedo, del Guaviare, solo para aprobar unos impedimentos presentados por representantes de la oposición, lo cual al final le valió la suspensión inmediata del partido por desacatar la posición acordada.
Una vez aprobados (aceptados) los impedimentos, Quevedo se retiró, tan silenciosamente como llegó, porque ya no era necesaria su presencia. El quórum, restando los congresistas que presentaron impedimentos aprobados, se redujo a 14, 9 de ellos afines al Gobierno.
Dentro de este grupo de congresistas está la representante liberal por Antioquia, María Eugenia Lopera, quien votó positivamente a pesar de la orden del jefe de su partido, el expresidente César Gaviria.
“Señores representantes, los impedimentos no se aprueban solo porque quien los presente sea de la oposición, sino por su contenido. Hubiera sido interesante que los leyeran y los debatieran, porque no se entendería que a unos congresistas se les aceptara y a otros se les negara, aunque la causa fuera la misma”, afirmó Jaime Alberto Cabal, presidente de FENALCO.
La recusación del representante, Víctor Manuel Salcedo, del Partido de la U, quién defendía la necesidad de una reforma que genere más empleos y que no los destruya, fue presentada a comienzos de mayo y aún no ha tenido trámite ante la Comisión de Ética de la Cámara. Eso le impidió votar, por el solo hecho de que la mesa directiva de la Comisión VII no la envió oportunamente.
“Esta serie de hechos “sorprendentes” puede viciar el trámite de la reforma laboral. Pero además, la violación del régimen de incompatibilidades e inhabilidades es causal de pérdida de investidura. Este no puede ser el trámite que se dé a una reforma tan importante como la laboral. “Jugaditas” como las de hoy, no son consistentes con el principio de buena fe que consagra la Constitución. Colombia no puede ser un país en el que se premie al “más vivo” sino al más trabajador, al más justo y al más legal”, agregó el vocero de los comerciantes.
“Una vez más hacemos un llamado, como lo ha hecho la mayoría de la opinión pública, en el sentido de que este proyecto de reforma laboral no le conviene al país, pues antes que generar nuevos empleos, los destruye, como también lo afirmó el Banco de la República coincidiendo con FENALCO, en que podrían ser alrededor de 450 mil puestos de trabajo afectados. Reiteramos nuestro llamado a que #DefendamosElEmpleo, siempre con respeto de las reglas democráticas”, concluyó el dirigente gremial.